La Escuela de Enfermería, creada en 1952, fue adecuando a lo largo de su existencia, su currículum según lo fueron exigiendo los avances científicos y educativos, comprometiéndose siempre con la realidad social de la provincia y la región. Con su labor contribuyó y contribuye al desarrollo social, científico y tecnológico de la Enfermería mediante las acciones de docencia, investigación y extensión, las cuales se vieron incrementadas significativamente en estos últimos años.
Pese a ser la Facultad de Medicina un buen continente, la Escuela de Enfermería como Institución ha ido creciendo paulatinamente, por cuanto la experiencia acumulada a lo largo de 56 años ha servido para afirmar en los hechos su autonomía académica porque los imperativos de su funcionamiento así lo han exigido.
El crecimiento cuantitativo y sostenido de la matrícula, producido en la última década demuestra la importancia de la Escuela de Enfermería frente a la demanda de formación de recursos humanos en esta profesión y la absorción de los mismos por el mercado laboral en toda la región y el país.
Las transformaciones ocurridas en la enseñanza de Enfermería, en los últimos años, han exigido ajustar los modelos organizativos, incorporar modificaciones metodológicas, diversificar la oferta institucional, adecuarse al nuevo concepto de Salud Pública, etc. y continuar intentando desde el espacio que ocupa en las profesiones de la Salud, satisfacer las necesidades de la comunidad en la cuál esta inserta.
La función de extensión al medio y la línea de desarrollo docencia – servicio, se combina con la necesidad de dar a los estudiantes una formación comprometida con la Salud de la Comunidad.
La Escuela ha desarrollado actividades en este orden, sobre todo a través de los Proyectos IDA, PUPC, UNI y UNIR, proyectos en los que la Escuela de Enfermería tuvo importante participación.
Poco a poco la Escuela de Enfermería ha ido diseñando su futuro, tanto desde el punto de vista de su estructura organizativa como de su funcionamiento.
Se reestructuraron las Cátedras pasando a construir núcleos docentes sólidos, dinámicos y descentralizados teniendo como asiento distintas unidades hospitalarias.
Se fue organizando también, la estructura administrativa de la institución, logrando definir claramente niveles de responsabilidad orgánicos – funcionales tal cual lo demuestra su actual organigrama.
Estos avances fueron debidamente acompañados, dotando a la Escuela de Enfermería del equipamiento didáctico y tecnológico necesario para el desarrollo normal de las actividades, acorde a los tiempos que se viven.
Estas pautas, por lo tanto, no hacen sino más que reafirmar nuestra convicción de que la transformación de la Escuela de Enfermería en Facultad de Enfermería se traduce, en los tiempos actuales, más que en un anhelo, en una necesidad. Esta transformación permitirá seguir contribuyendo significativamente a la respuesta que la Universidad Nacional de Tucumán da a la comunidad a la cual pertenece y debe responder, lo que en otros términos constituye una prioridad dentro de la realidad local, regional y nacional.
Ya en 1952, la Universidad Nacional de Tucumán considera que la Enfermería debía ofrecer al medio otro perfil de profesionales formados en ajustes a modelos académicos vigentes y con este propósito hizo suya la responsabilidad de preparar a los enfermeros que necesitaba no sólo Tucumán sino también el noroeste argentino y el país, creando el 4 de mayo de 1952 el “Curso de Nurses y Visitadoras de Salud Pública” cuya área académica pertenecía a la Facultad de Medicina y el área administrativa al Ministerio de Salud Pública de la Nación.
Doce años después, en 1964, el “Curso de Nurses y Visitadoras de Salud Pública” pasa a funcionar como “Escuela Universitaria de Enfermería” (Res. Nº 306/64) dependiendo exclusivamente de la Facultad de Medicina. La carrera tuvo entonces 4 años de duración y los egresados obtenían el titulo de “Enfermero Universitario”.
La creciente expansión y mejoramiento de los servicios de salud, resultante del profundo y rápido cambio social y tecnológico, trajo entre otras consecuencias, el reconocimiento del papel de la enfermería en los programas de salud y por ende la demanda de enfermeros profesionales para la diversidad de funciones que surgieron.
Para satisfacer estos requerimientos la Escuela tuvo que modificar su plan de estudios creándose la carrera en ciclos. Al completar los dos años y medio de estudios se otorgaba el diploma de “Enfermero” y a los cuatros años el título de “Licenciado en Enfermería”, incorporándose la exigencia de un trabajo final de graduación.
En 1980 se lleva a cabo una revisión del plan de estudios teniendo en cuenta los nuevos lineamientos en la atención de la salud surgidos en la conferencia de la OMS en Alma Ata definiendo la meta social “Salud Para Todos en el año 2000” y la estrategia de Atención Primaria de Salud. Por otro lado, se adecua al modelo de estructura de carreras universitarias diseñado por el Ministerio de Bienestar Social de la Nación.
Como resultado de esta revisión, el plan de estudio fue estructurado de manera que pudiera formar al egresado que las circunstancias requerían, los ejes curriculares viraron hacia la salud comunitaria, la prevención, la epidemiología, etc. en respuesta a los nuevos paradigmas en salud e innovaciones metodológicas.
En Junio de 1983, a requerimiento de gobierno municipal y comunidad de Aguilares, se iniciaron los trámites antes las autoridades de la Universidad Nacional de Tucumán, para la creación de una Escuela de Enfermería en dicha localidad del sur de la provincia.
En Marzo de 1984, se suscribe el primer convenio entre la Universidad Nacional de Tucumán y la Municipalidad de Aguilares, mediante el cual se crea la filial de la Escuela de Enfermería con un Plan de Estudios de 3 (tres) años. En el mismo año se firma un nuevo convenio entre el Rectorado, la Municipalidad de Aguilares la Comisión Pro –Centro Universitario (PROCUA). A través del mismo se ratifica la creación de la Escuela de Enfermería pero con un plan de estudios de 5 (cinco) años, denominándose la carrera “Licenciatura en Enfermería”. La dependencia de la Facultad de Medicina es a través de su Escuela de Enfermería (Convenio Nº 344/84).
En 1985, la Escuela Filial Aguilares comienza sus actividades, dictándose únicamente el primero y segundo año de la carrera en su sede y los subsiguientes en la Escuela cabecera de la Capital. En el mes de septiembre de 1995, en la Filial Aguilares se pone en funcionamiento el 3º Año de la Carrera, mediante convenio Nº 1182/95.
En esta breve síntesis se ha tratado de reseñar la trayectoria y la expansión que ha tenido desde su creación la Escuela de Enfermería de la Universidad Nacional de Tucumán y su filial de Aguilares.
Cabe destacar que no fue fácil la tarea de encausar su organización a lo largo de 56 años. La experiencia ha servido, indiscutiblemente, de consejo inmediato para la realidad del presente, que es el resultado de la suma de muchas resultantes que sirvieron para la fructífera y reconocida labor que la Escuela de Enfermería de la Universidad Nacional de Tucumán ha desplegado.
Sus egresados desde la primera promoción han contribuido a la formación y desarrollo de otras Escuelas de Enfermería del país, por ser la de Tucumán la primera y más antigua de la Argentina, contando desde sus orígenes con excelentes y destacados docentes que han respaldado la formación de sus graduados.